Al instante descubro que uno de los empujones del Manu estrella contra la pared al guiri. Inmediatamente aquel rincón se llena de guiris, tíos y tías, pegándole patadas y puñetazos al Manu. Toda la panda se mete para
Texto perteneciente a la novela titulada CALIENTE (pág. 159).