La justicia

De derecha a izquierda, Josep Bofill y Enric Frigola en 1920 (fuente: http://www.lletres.net/pla/QG/?cat=36&paged=7)

–La justicia teórica, absoluta, es un enorme revulsivo. La justicia se debe tomar con calma y debe aplicarse en pequeñas dosis…
–Lo que parece darte la razón son las noticias de la revolución rusa… -insinúa el señor Enric Frigola.
–¡Es posible! -dice Bofill-. Los rusos están implantando ahora la justicia en su país. Sufrirán muchísimo. Lo pasarán muy mal. Se verán obligados a crear un Estado meramente policíaco, frío, siniestro. Pasarán mucha hambre y sed, tendrán que ampliar todas sus prisiones, tendrán que demoler todo aquello que hace agradable la vida. Y, así y todo, no implantarán ninguna forma de justicia. Mi idea es que no puede haber alimentos ni una forma mínima de vida en común, sin un determinado grado de injusticia. ¿Por qué hay mujeres feas y mujeres guapas? ¿Por qué tiene que haber hombres inteligentes y hombres estúpidos? ¿No es una injusticia? Si aplicamos la justicia a una situación así, no tendremos más remedio que matar a las mujeres guapas y a los hombres inteligentes…
En la tertulia la confusión va en aumento. Coromina, nervioso, se muerde una uña. Los otros nos hacemos aparentemente los distraídos. La reunión se disuelve por agotamiento.

Fragmento perteneciente al diario de Josep Pla, El cuaderno gris (pág. 39).

Escritos míos donde aparece Josep Pla:

Dietario en Red 2004-2006
Dietario en Red 2007-2008
Articulismo formal
Crónicas estivales
Mi cuaderno gris

Etiquetado , , , , , , , , , , , , .Enlace para bookmark : permalink.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *