A día de hoy se nos ve a todos muy recuperados. No puedo dejar de afirmar que este grupo que encontré devastado por la tos, es de lo mejorcito que he hallado en mis siete años de experiencia. Guardan silencio. Atienden. Absorben. Preguntan. Se transforma en gozada poder transmitirles mis trucos gramaticales, comprobar cómo se quedan boquiabiertos con ellos, con caras de luz.
—Es atractivísima la gramática, ¿eh? —les digo en broma.
Fragmento perteneciente a DIETARIO EN RED 2009-2010