Mala sangre de la muerte

El agonizante no puede dar crédito a su suerte

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 160).

Cruzando a la otra dimensión

Dejemos en paz a la muerte

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 159).

Retrato de un hombre malvado

—Tú, en esta vida, vas a ir de puto culo si mueves las manos así.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 145).

La ley de la tierra

Las burbujas de aquellas aguas provenían de las ramas de los cipreses.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 138).

Desde las alturas

Si la difunta abriera los ojos ahora y se aceptara como es,

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 129).

El misterio de la existencia

Mirando los delicados ojos dormidos de la difunta Mercedes,

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 128).

Un muerto errante

los chorros de luz violeta que despiden tus ojos.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 127).

San Juan Despí, un instituto

(…). Salgo con una gratísima sorpresa, la de ser consciente de que aún existen institutos que conservan la vieja tradición del antiguo BUP y COU, aquellos institutos de Bachillerato que existieron hasta finales de los 90, en los que predominó un obligado esfuerzo de sus alumnos. He podido constatar en este centro que los chavales atesoran cierto nivel, que los nenes están acostumbrados a trabajar, un asunto que han asimilado como algo natural. He mandado deberes a más no poder. La inmensa mayoría los traía hechos. Y sin refunfuñar. Está tan arraigada la costumbre del trabajo en este centro, que incluso los críos castigados a la hora del patio hacen sus tareas, bolígrafo en mano, pese a sus carantoñas, sus pedorretas, los cachondeos intrínsecos a la edad. Ojalá se mantenga muchos años la actual línea docente de este centro. No es normal encontrar un instituto como el que acabo de conocer, sin apenas deterioro (…).

Fragmento perteneciente a DIETARIO EN RED 2009-2010

Un mirón

La viciosilla Gemma se regodea ante el espejo como su madre la parió.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 120).

Fascinante más allá

Bucólica representación de espíritus

—¡Buenas tardes, y buen provecho! —dicen, casi al mismo tiempo.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 107).

La importancia de una madre

Preciosa figura maternal

¿Dónde estará mi madre?

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 106).

Misterios opacos

Tópica representación de almas en pena

Con esto quiero decir que algunas personas logran verme y tratarme como si fuese un hombre cualquiera.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 105).

El otro mundo

Restos humanos

O se sumergen si sus tumbas se alojan bajo tierra, a fin de averiguar qué queda de sus restos.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 103).

Los muertos escuchan

Luis Cernuda

El muchacho recuerda que ayer soñó con la difunta Mercedes

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 89).

El Cartucheras

Imagen del viejo oeste americano

A Pepín le divierte mucho este solterón de cincuenta y cinco años, con esos aires interpretativos de chico pistolero y sus salidas disparatadas.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 84).

Pasiones y muerte

La tirante Esperanza está enterrada en el cementerio de San Juan Despí.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 79).

La tirante Esperanza

Noviazgo

La tirante Esperanza era una mujer muy chocante desde el primer momento,

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 78).

La sinuosa Gemma

Agua de la ducha

, allá en el lavabo de la casa más alejada del bar Los Cordobeses, al final del Paseo,

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 74).

La difunta Mercedes empieza a caminar

Como una persona solitaria en la niebla

Que tú hace dos días estabas viva, y ahora muerta.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 62).

El abrigo de los cipreses

Cipreses en un cementerio

Otra vez digo que los olores traen recuerdos.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 61).

Niñez en La Victoria, Córdoba

Cipreses

Los olores traen recuerdos.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 59).

El esqueleto Federico y la joven Angelines

Despertar, de Marilu Kuhne

El esqueleto Federico está más frío que la difunta Mercedes.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 55).

Su mujer, de La Victoria, Córdoba

Persianas echadas

A mi mujer, este año, se le ha disparado la gordura.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 54).

La abuela de Montilla

Manos de la vejez

«Bendita la luz del día y el Señor que nos la envía con su caridad y amor que tan grande es».

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 50).

En Allepuz, Teruel

Mujer orinando

«O eres una mala sombra o me estoy volviendo loco».

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 49).

La madre de la difunta Mercedes

Llanto

Cuántas lágrimas han brotado a lo largo de los tiempos.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 36).

1984

Una imagen del mundo

Cualquiera entiende las cosas que pasan en la vida.

Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 23).

DÍA DE REYES

Regalos de Reyes

Día de Reyes. Este camelo

Fragmento perteneciente a DIETARIO EN RED 2007-2008.