Ya tenemos el vigésimo primer acto de la La Celestina. Y el lamento del padre de la joven Melibea, que yace hecha pedazos frente a la madre, que queda postrada encima, tal vez muerta. Menudo trago.
LA CELESTINA. VIGÉSIMO PRIMER ACTO es la vigésima segunda entrega de la adaptación al castellano moderno de LA CELESTINA, realizada por el escritor barcelonés Antonio Gálvez Alcaide.
En LA CELESTINA. VIGÉSIMO PRIMER ACTO aparece el padre de la joven Melibea desoladamente triste. Le muestra a su esposa el cuerpo hecho «pedazos» de la hija, en un sentido monólogo dirigido a la hija, puesto contra el mundo, contra sí mismo, contra el amor, plagado de interrogaciones retóricas, de verdades incontestables. Frente a todo lo expuesto, sólo queda la resignación.