Verticalidad en los selfis

El gusto de la verticalidad en los selfis. Aquí, en la Costa Dorada (Tarragona), frente a la playa de San Salvador, a medio camino de Comarruga y Calafell. Magnífico paseo. Y parte del espacio de uno de mis relatos, el titulado «Calafell Playa«, del libro Trenzado de homicidas.

 

Calafell Playa, cinco localizaciones

Aquí tenemos cinco localizaciones en vídeo sobre el espacio en que se desarrolla el relato «Calafell Playa«, del libro Trenzado de homicidas.

Más información, desde la siguiente página:

https://www.morfeoeditorial.com/infotrenzado.html

En la estantería… Trenzado de homicidas

Qué buena compañía tiene, ahí, mi libro de relatos Trenzado de homicidas, junto al escritor Juan Rulfo  con su novela Pedro Páramo y su libro de relatos El llano en llamas. Literatura pura y dura en un mundo literario aséptico, absolutamente vergonzante.

Vídeo de Trenzado de homicidas (2018)

Aquí tenemos el vídeo de Trenzado de homicidas en la reedición de 2018.

Vídeo de Trenzado de homicidas, de Antonio Gálvez Alcaide

Presentación de Trenzado de homicidas en You Tube

Sinopsis

TRENZADO DE HOMICIDAS representa una irrefrenable vuelta de tuerca sin tapujos en el examen de la violencia humana de nuestros días. Sus ocho historias, completamente independientes, se trenzan y sugieren la idea de que cualquiera de nosotros puede verse atrapado en la penosa suerte del azar y sumergirse en la transfiguración de una alimaña, o ser víctima de ella. Tanto las situaciones como sus personajes son muy variados. Así, el desquiciamiento y la neurosis planean por el cielo de San Sebastián con el trasfondo de ETA («Un puzzle gris»); el victimismo de un profesor misógino estalla gravemente ante la indiferencia de lo cotidiano («El fragor de la sangre», también en ebook); el pacifismo de un vagabundo se quiebra frente a una amenaza de muerte («Sobre los escombros», también en ebook); la rapiña de una red pederasta devora y se devora a sí misma («El itinerario», también en ebook); el adulterio femenino se ceba con un hombre apocado, mientras otro se ve en él, como en un espejo («Síntomas», también en ebook); los críos se convierten en auténticos monstruos de homofobia («Cosa de tres», también en ebook); la influencia de una secta opera sobre un matrimonio que la creía superada («El acoso»); la fiesta nocturna se hace añicos por un pequeño detalle inimaginable («Calafell Playa», tambien en ebook), en la historia de ficción más autobiográfica escrita hasta ahora por su autor.

Trenzado de homicidas, nº 1

Tema Amazon. Muchas veces reconforta el sentido deportivo de la vida. Me complace comunicaros que mi libro de relatos titulado TRENZADO DE HOMICIDAS es, en este momento, número 1 en ventas en Japón, en la categoría de libros de cuentos.

Muchas gracias.

Cuestión de edad

Funeral de Francisco Franco

—Estoy muy intrigada. ¿Es verdad que tienes treinta y tres años?
—Por supuesto. Nací a finales de 1963.

Fragmento perteneciente a
TRENZADO DE HOMICIDAS
.

Calle Monturiol, a tope

Four Roses

Tengo un buen cebollón. Probablemente se me nota.

Fragmento perteneciente a
TRENZADO DE HOMICIDAS
.

Un vídeo casero robado

Mis amigos creyeron que lo iba a echar de casa a hostias.

Fragmento perteneciente a
TRENZADO DE HOMICIDAS
.

Noches de fiesta

Manel, yo, Tete, Carmelo, Jorge, Vale

De calentura se presenta la noche. Las noches calurosas son las mejores. Las tías sudan más, beben más, se les va la olla antes. Tengo la sensación de que la noche se presenta de puta madre. Nosotros somos seis, los seis: el Manel, el Tete, el Vale, el Carmelo, el Jorge y yo. Somos los mejores, los de más palique.

Fragmento perteneciente a CALAFELL PLAYA, del libro
TRENZADO DE HOMICIDAS.

¿Fenómenos paranormales?

Formas extrañas

—¿La has visto?

Fragmento perteneciente al relato
titulado «El acoso» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 114).

Viento terrorífico

Ejemplo de viento huracanado

El viento se cebó con él de la forma más cruel que pudo.

Fragmento perteneciente al relato
titulado «El acoso» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 105).

En un bar barcelonés

Erotismo de bar

—¡Soy la reina de la tierra, la reina de los mares!

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Cosa de tres» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 94).

Prostitución en Barcelona

Prostitutas por los aledaños del Camp Nou, Barcelona

Flor besó su cruz, como hacía siempre después de espolvorear palabras indecentes.

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Cosa de tres» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 87).

Delitos sexuales

Así podría empezar un delito sexual

—Margaret, separa las piernas y acaríciate con la otra mano.

Todos sabían qué debían hacer.

Fragmento perteneciente al relato
titulado «El itinerario» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 57).

En la Plaza Cataluña, por la noche

Plaza Cataluña, Barcelona, por la noche

Me desmorono en el césped de la plaza Cataluña. Los ojos de la infancia me observan.

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Sobre los escombros» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 45).

Furia helada

Robert de Niro en Taxi Driver

Cae la torre. Estoy muy excitado. Parezco un personaje de Tarantino.

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Sobre los escombros» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 44).

Cruda realidad

Skins

Se ríen una y otra vez. Si saliera por patas me pillarían a los cinco pasos. Tengo la sensación de que todo me importa una mierda:

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Sobre los escombros» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 43).

En una plaza nocturna de Barcelona

Plaza nocturna

El sueño llama a la puerta. El cine, el banco y la poca luz son unas compañías muy gratas.

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Sobre los escombros» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 42).

En el cine

Robert de Niro, en El cabo del miedo

Robert de Niro me ha hecho vibrar, como en los viejos tiempos. Se encienden las luces del cine. Este resplandor

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Sobre los escombros» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 40).

Perdición

Camarón de la Isla

Escucho el cante de una radio que está por ahí, y me altera la figura de Camarón, su cante, el mejor regalo que podía ofrecerte en los cumpleaños.

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Sobre los escombros» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 38).

Dramática rutina

Lope de Vega

Todavía no he conseguido emular las gestas de Lope de Vega, poeta y sacerdote,

Fragmento perteneciente al relato
titulado «El fragor de la sangre» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 33).

Prosigue el poema de Quevedo

Un orinal

—El subapartado siguiente —digo— es el más largo. La pareja se desnuda y se produce un contacto sexual. ¡Tssss! Por favor, absténganse de murmullos. «El-pié-la-go-de-car-

Fragmento perteneciente al relato
titulado «El fragor de la sangre» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 31).

Naturalidad frente a lo innombrable

Pedro Salinas

Y de nuevo me acuerdo de ti, de tu Razón de amor, poeta Salinas:

Fragmento perteneciente al relato
titulado «El fragor de la sangre» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 30).

También con Ramón Gómez de la Serna

Ramón Gómez de la Serna

Don Ramón Gómez apura el tiempo y me dice, cachondo, que los negros tienen «el

Fragmento perteneciente al relato
titulado «El fragor de la sangre» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 29).

En la playa de La Concha

Playa de La Concha, San Sebastián

La islilla reverberaba de frescura, exigía ideas frescas.

—¡Yo qué sé!

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Un puzzle gris» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 11).

Muerte cercana

Etarras

—Sí, por qué.
—Porque lo acaban de hacer picadillo en Bilbao, junto a un teniente y varios rasos.

Fragmento perteneciente al relato
titulado «Un puzzle gris» , del libro TRENZADO DE HOMICIDAS (pág. 8).