A la luz de la lamparilla, encontró a Magdalena completamente dormida, consumida por un día adverso que se resistía a desaparecer.
Fragmento perteneciente a la novela titulada El solitario (pág. 112).
A la luz de la lamparilla, encontró a Magdalena completamente dormida, consumida por un día adverso que se resistía a desaparecer.
Fragmento perteneciente a la novela titulada El solitario (pág. 112).
—¡Mira, escucha, que soy la Guadalupe, tu suegra! ¡Que te hablo desde aquí, desde Fuentes de León! ¿Me conoces?
Fragmento perteneciente a la novela titulada El solitario (pág. 108).