Veo que tengo un libro mío de viajes como número 1 en ventas, en Francia, en Amazon, en la categoría de libros en español y de viajes. Se trata de Córdoba. Sí, aquella Córdoba lejana y sola, aquella Córdoba.
MUCHAS GRACIAS.
Salta la sorpresa. En la capilla de san Esteban y san Bartolomé descubro una pequeña urna funeraria. No me la esperaba. Sobre ella no tenía ni idea. Estoy frente a la tumba de don Luis de Góngora, muy buen poeta, famosa gran nariz, oscuridad de latines caprichosos.
Fragmento perteneciente a CÓRDOBA.
El asunto parece una alucinación producida por el alcohol (la cosa me pilla con una copa de whisky, para que se me purifique la vesícula): acabo de darme cuenta de que tengo otro título mío como número 1 en ventas en la tienda de Amazon.
Ahora se trata de mi libro de viajes Córdoba. Ay, aquella Córdoba, lejana y sola.
MUCHAS GRACIAS.
Efectivamente, fue un viaje sentimental. La portada recoge la fachada de la casa que perteneció a mis bisabuelos, en Aguilar de la Frontera. También aparece la Virgen de la Torre, que mira desde su torre del siglo VIII, en La Victoria, el pueblo de mis padres. Lo que son las cosas, vibré más en el museo de Julio Romero de Torres que en la Mezquita, allá, en aquella Córdoba tan perfumada.
Las burbujas de aquellas aguas provenían de las ramas de los cipreses.
Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 138).
¿Dónde estará mi madre?
Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 106).
Otra vez digo que los olores traen recuerdos.
Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 61).
Los olores traen recuerdos.
Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 59).
A mi mujer, este año, se le ha disparado la gordura.
Texto perteneciente a la novela titulada EL PASEO DE LOS CARACOLES (pág. 54).
Mis últimos pasos en La Victoria. Estoy sentado en un taburete. Acabo de pedir un cortado en el bar del Traperín, un bar donde mi padre, en algunas ocasiones, se pasaba las horas muertas. Amplio espacio.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Estoy frente a la casa donde vivieron mis padres, la casa de mi abuela mama Antonia. Está situada en la calle Federico García Lorca, bonito nombre, en el número 6, que se desvía en perpendicular, pues corresponde a lo que queda de la desaparecida calle El Pardito.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Entrada en La Victoria, Córdoba, el pueblo de mis padres. He de desandar un poco lo rodado por el taxi, ya que simpatizo con retratarme junto a la señal de tráfico que anuncia el pueblo que visito. Recuerdo que hice lo mismo en Iria Flavia, la aldea de Camilo José Cela.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Tras tomar un café con leche en un bar de la plaza del Potro, me monto en un taxi que me lleva a La Victoria, el pueblo de mis padres, que se ubica a unos treinta kilómetros. La Victoria, uno de los espacios de mi novela El Paseo de los Caracoles. Ternura. Desarraigo.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Qué gran visita acabo de hacer. Frente a la obra del pintor cordobés, me he acordado mucho de la obra del poeta granadino. Acabo de respirar cierto aliento lorquiano.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Poco antes de emprender la salida, respiro hondo sin saber por qué. Camino de la salida, agradezco a los que trajinan su conmiseración. Cierro la puerta de la iglesia. Repentina lluvia de calor. Ensancho la vista hacia el adiós de Aguilar.
P.D. De Aguilar es María, conocida como la Virgen, uno de los personajes de la novela El Paseo de los Caracoles.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
La memoria de mi madre se mantiene más clara que el agua fresca. Encuentro el nacimiento de la calle Calvario, que coincide exactamente con sus instrucciones.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Nada más poner pie en Aguilar, llamo a mi madre, que vivió aquí tres años. Mi madre estuvo aquí de chiquilla, de los diez a los trece años. Se trasladó a la casa de sus abuelos, en la calle Calvario, 56, con sus hermanos y sus padres. Aquí vivió mi madre los tres años de la Guerra Civil.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
En el autocar, camino de Aguilar de la Frontera, el pueblo de mi ascendencia por parte de madre. De Aguilar eran mi abuela mama Antonia y su familia.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Digo que este río es muy pálido y cachazudo porque me acuerdo del Ebro a su paso por el puente de Tudela de Navarra.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Acabo de salir escopeteado de la Mezquita.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Todavía no he hablado sobre la respiración en Córdoba.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
En el tren, un tren que se llama Arco. Desde Barcelona a Córdoba. Salida puntual, a las ocho de la mañana. Mi espacio posee la única mesa del vagón. Me rodea una familia completa, incluidos los abuelos.
Fragmento perteneciente a
CÓRDOBA.
DIETARIO EN RED 2009-2010.
Ayer, a mediodía, cambié el abrigo por la chaqueta. Ya asoma, por el lejano horizonte, la cabecita de la primavera, con su humor efusivo, arremangado. Ya se atisba la alegría descansada del próximo espacio en blanco, el siguiente periodo vacacional que me toca, el que ofrece la Semana Santa. Si todo va bien lo aprovecharé para poner pies en polvorosa: Córdoba.
Fragmento perteneciente al libro Dietario en Red 2009-2010
Con la entrada del otoño, tiene los días contados mi gazpacho casero.
Entradilla inicial. Texto de DIETARIO EN RED 2004-2006