(…). Salgo con una gratísima sorpresa, la de ser consciente de que aún existen institutos que conservan la vieja tradición del antiguo BUP y COU, aquellos institutos de Bachillerato que existieron hasta finales de los 90, en los que predominó un obligado esfuerzo de sus alumnos. He podido constatar en este centro que los chavales atesoran cierto nivel, que los nenes están acostumbrados a trabajar, un asunto que han asimilado como algo natural. He mandado deberes a más no poder. La inmensa mayoría los traía hechos. Y sin refunfuñar. Está tan arraigada la costumbre del trabajo en este centro, que incluso los críos castigados a la hora del patio hacen sus tareas, bolígrafo en mano, pese a sus carantoñas, sus pedorretas, los cachondeos intrínsecos a la edad. Ojalá se mantenga muchos años la actual línea docente de este centro. No es normal encontrar un instituto como el que acabo de conocer, sin apenas deterioro (…).
Fragmento perteneciente a DIETARIO EN RED 2009-2010